Recibieron varios llamados con denuncias y tuvieron que intervenir entre 60 y 70 locales por incumplimiento de la normativa vigente. Uno vinculado a locales gastronómicos que tenían clientes consumiendo en su interior, otro de un local de no esenciales que tenía clientes en su interior cuando sólo pueden funcionar con los sistemas de take away y delivery, y el tercer motivo relacionado con locales no esenciales que pasadas las 18 (horario límite de cierre) seguían con sus puertas abiertas.
Por otra parte intervinieron en cerca de cinco intervenciones por reuniones familiares con menos de 10 personas, las cuales fueron desalojadas.