Francisco es un joven de 20 años que tiene parálisis cerebral y retraso cognitivo. Su mamá, Mara Recondo, presentó en febrero el sexto amparo en contra de la obra social Patrones de Cabotaje de Ríos y Puertos (Ospacarp) que no reconoce las prestaciones que su hijo necesita.
La lucha se inició en 2012 y tampoco hay respuestas por parte de la justicia. Francisco necesita un almohadón para la silla de ruedas, un traje que mejora su postura corporal y sesiones de equinoterapia.
“Llevamos dos meses esperando no solo que la justicia se expida, sino que la obra social cumpla. Mientras tanto mi hijo sigue usando el sistema que le queda chico y lo lastima al igual que el almohadón que está roto y también lo lastima”, aseguró.