Un curioso incidente ocurrió el lunes en una vivienda de la calle Parera al 600.
En el marco del Día de la Inmaculada Concepción de María, la dueña le prendió una vela a la Virgen en un pequeño altar que tenía junto a la imagen de otros santos y se prendió fuego, así como también la habitación.
Según informaron los servidores públicos, el hecho ocurrió cerca de las 20.30 aunque la propietaria, de 42 años, no se encontraba en el inmueble.
Un vecino notó lo que estaba sucediendo e intentó colaborar pero se golpeó la cabeza con la reja frontal de la casa y sufrió un corte en el cuero cabelludo, por lo que tuvo que ser trasladado al hospital.
Trabajaron en el lugar la guardia de Defensa Civil y los bomberos del Cuartel Central, quienes lograron apagar las llamas a tiempo.