Pasaron cinco años del día en que Nisman apareció muerto en el baño de su departamento en Puerto Madero. Dudas, tironeos políticos e hipótesis mediáticas azotaron la investigación durante este tiempo. Mucho se habló de la contaminación política y de su influencia en la “grieta” que existía a partir de las especulaciones de la muerte del fiscal.
Raúl Woscoff, abogado bahiense y escritor de Tikvá, un libro que relata la historia de una periodista israelí que investiga hechos de la dictadura que se enlazan con el atentado a la sede de la Amia, asegura que respecto a la investigación “va ganando la impunidad a la verdad”.
Esta entrada ha sido publicada el 17 de enero, 2020 15:35
Deja un Comentario