Dos policías se encontraban de turno vigilando la esquina de Fragata y Tres Sargentos, cuando vieron un bolso con algunos objetos de valor y una importante suma de dinero. Aparentemente su dueño no se había dado cuenta que lo olvidó.
Quizás el destino puso a los oficiales allí, porque de lo contrario, no sabríamos dónde hubiera terminado el bolso. Luis Álvarez y Pablo Bilbao inmediatamente se contactaron con el propietario luego de que encontraran una tarjeta dentro con su nombre y número de teléfono.
Cuando se lo devolvieron, conocieron la verdadera historia: el hombre está desempleado, lo habían echado del trabajo y ese dinero era lo que le quedaba de la indemnización que recibió.
Ante esto, Bilbao y López recordaban anécdotas de cuando iban juntos a la escuela de policías. En aquellos días, alguna vez, charlaron sobre qué harían si encontraban un bolso con dinero y su respuesta fue la misma que ahora: devolverlo.