La inestabilidad económica no solo afecta al bolsillo del ciudadano sino también a su salud mental. La Licenciada en Psicología Laura Berstein explica en Canal Siete de qué manera repercute esto en nuestras emociones.
“Si la gente está estresada y tiene trabajo es radicalmente diferente a estar estresado y no tener trabajo” resalta Berstein. Además, hace énfasis en que el trabajo dignifica a la persona y es imprenscindible para la salud mental, por lo que la falta de este causa una desestabilización emocional muy importante.
Distinto es el caso de las personas que sí tienen trabajo pero viven con la preocupación de perderlo o sabiendo que su salario es insuficiente. Ante esta situación “hay que tratar de reacomodarse con lo que ofrece el momento, para no desestabilizarse del todo y no perder los lazos cotidianos”, advierte la Licenciada.
Por último destaca que no es un problema individual sino social y recomienda que para pasar estos temores, es conveniente agruparse con personas de su misma manera de pensar a sociedades de fomento, movimientos, partidos políticos etc. “La soledad es mala consejera” concluyó.