El día de la explosión, el fiscal Romero Jardín inició una causa de oficio y la remitió al fiscal Aguilar por incompetencia, entendiendo que podría tratarse de un delito culposo.
Aguilar convocó a ingenieros de la UNS para dar con más detalles. Realizaron una inspección con el juez de garantías Guillermo Mércuri, para tomar contacto directo con las consecuencias de la explosión. Se solicitó la presencia del juez ante eventuales órdenes de secuestro y por si la empresa no les permitía acceder.
La fiscalía concurrió con los ingenieros para verificar qué pasó y se requirió la documentación y los registros que los ingenieros consideraron necesarios. Se pidieron otros documentos que serán presentados mañana en la fiscalía.
Para que sea delito esta explosión se requieren las siguientes situaciones: que una persona resulte herida o muera (lesiones culposas y homicidio culposo) y que haya riesgo de afectación a bienes y personas. De lo contrario pueden ser solo sanciones administrativas.
Esta entrada ha sido publicada el 1 de julio, 2019 11:28
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