El Senado convirtió en ley el Presupuesto 2019 gracias a una parte de los votos del peronismo, cercano a Miguel Ángel Pichetto, que acompañaron al oficialismo en un debate que duró más de 13 horas. El proyecto central obtuvo 45 votos a favor, 24 en contra y una abstención, tras el respaldo de Cambiemos, de una parte del Bloque Justicialista y de las bancadas provinciales como el Movimiento Popular Neuquino (MPN) y el Frente Renovador de Misiones.
El rechazo fue encabezado por el Frente para la Victoria-PJ y otra porción importante del Bloque Justicialista que, en medio de un debate sin grandes estridencias, mostró una división entre sus filas.
Las exposiciones de Cambiemos se centraron en el “equilibrio fiscal” del Presupuesto 2019, la política de “ahorro”, el nivel de gasto social (que ronda el 70%) y el “consenso” con gobernadores peronistas, argumento que también usaron algunos de los justicialistasque votaron a favor.
El FPV-PJ y los justicialistas que se expresaron en contra se centraron en el “ajuste” de las cuentas públicas que refleja el proyecto, el crecimiento de la “deuda externa” y la insuficiencia, a su criterio, de las modificaciones logradas a lo largo de la discusión del Congreso.
El Presupuesto 2019 implica entre otras cosas un ajuste que lleve a cero el déficit fiscal del Estado, con importantes recortes en diferentes áreas del Estado. Junto a esta iniciativa se aprobó la modificación del impuesto a los Bienes Personales, que exceptuará del pago a las viviendas únicas y el texto complementario al pacto fiscal firmado con los gobernadores el año pasado.
Cómo fue el debate
La sesión se hizo en el medio de manifestaciones y marchas en las inmediaciones del Congreso, tal como sucedió el día en que se debatió el proyecto de Presupuesto en la Cámara de Diputados. La intersección de Avenida de Mayo y 9 de Julio fue interrumpida por una movilización de MP Dignidad y sobre la misma vía marchó la CTA Autónoma. Los militantes de Unidad Ciudadana y Nuevo Encuentro se reunieron desde las 13 en el mismo lugar.
Al inicio de la sesión, el oficialista Esteban Bullrich destacó que el Presupuesto 2019 favorece el “ahorro” al trazar los objetivos de “déficit cero y equilibrio fiscal”, y advirtió que “no es gratis la inflación“. El presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda vinculó ese problema económico con que el país tuvo “en 100 años, 89 de déficit fiscal“, y ello generó “falta de ahorro”.
Por su parte, el jefe del bloque Frente para la Victoria-PJ (FPV), Marcelo Fuentes, señaló que el proyecto propone “más bicicleta financiera” y consideró que “la reducción del gasto en servicios sociales en términos reales, no nominales, será del 6%”, al tiempo que señaló que “la deuda pública es del 87% del PBI”. “Resulta cínico venir a plantear como una virtud desarrollar programas de emergencia para enfrentar la misma crisis que yo mismo creo con las políticas que estoy pidiendo que me voten”, ironizó el neuquino en referencia al Gobierno.
Entre los defensores del proyecto estuvo el radical Ángel Rozas. “Este no es el presupuesto ideal pero que es el posible, al que llegamos después de un entendimiento con un grupo importante de gobernadores y de opositores”, comentó en el cierre de su discurso.
Uno de los críticos más fuertes fue el formoseño José Mayans, del Bloque Justicialista, quien a raíz de este tema se expuso una fuerte diferencia interna con Pichetto. “Vamos a autorizar el endeudamiento más grande de la historia argentina. Ese es el punto central de este presupuesto. Son 400 mil millones de dólares”, advirtió.
Otro senador que votó en contra fue Pino Solanas. El representante de Libres del Sur dijo que no confía en que la iniciativa sirva para solucionar los problemas de la Argentina. “Cuántas veces escuchamos hablar del déficit cero a los voceros de la dictadura. Este presupuesto es una burla a la sociedad y a los legisladores. Este cuento infantil de la inflación al 23%, no es serio. El fantasma de Neustadt planea sobre el Gobierno y este Senado”, aseguró.
Cristina: “Hablamos de hacer sacrificios pero acá venimos en avión”
Entrada la madrugada, Cristina Kirchner hizo uso de la palabra en el Senado y se despachó contra el proyecto del Presupuesto 2019. Para la expresidenta, la iniciativa fue “impulsada y planificada por el FMI”.
“Estamos ante planillas diseñadas para cumplir el déficit cero, que también se trató durante 2001”, comenzó Cristina, quien aseguró que detrás del proyecto “se esconde un dibujo destinado al pago de la deuda y, fundamentalmente, bajo la planificación del Fondo Monetario Internacional”. A partir de ahí, enumeró países que buscaron aplicar el sistema de déficit cero que pretende el Gobierno. “Hubo ocho experiencias de este tipo en el mundo y ninguna tuvo éxito”, lanzó.
En un discurso notablemente económico, Cristina Kirchner comparó números de otros países que también intentaron lograr el déficit cero en sus economías y no lo lograron. “Estamos ante planillas que fueron diseñadas para cumplir el déficit cero. Ante esto se esconde un dibujo destinado al pago de la deuda. No estamos tratando la ley del Presupuesto sino la ley del déficit cero”, expresó.
La ley contempla un gasto total de más de 4 billones de pesos ($4.172.312.239.441), un dólar promedio de 40,10 pesos, inflación interanual del 23% para diciembre del año próximo y una caída de la economía del 0,5% del PBI, mientras que los servicios de deuda aumentarán 48,8% respecto de este año.