Se cumple un año del crimen de Ramiro Barragán, el comerciante asesinado en el barrio Noroeste. Hay dos detenidos por el hecho: Juan Ortiz, quien efectuó el disparo mortal y perdió la documentación en el lugar del hecho y Gastón Figueroa, conductor de la moto con la que escaparon los sujetos. Aún no hay fecha de juicio.
Hay un compás de espera porque la sala 2 de la cámara de apelaciones de nuestra ciudad debe resolver un planteo de nulidad presentado por la defensa de Figueroa. La presentación se realizó porque la jueza no hizo lugar a una prueba que ofreció
El fiscal Mauricio Del Cero, a cargo de la investigación, pidió que ambos sean imputados de homicidio doblemente agravado criminis causa y por uso de arma de fuego, que para el código penal implica prisión perpetua.
La jueza de garantías Susana Calcinelli entendió que Figueroa debe ser imputado del delito de “Robo calificado”, que prevé condenas muy inferiores.
El hecho:
Juan Manuel Ortíz en compañía de Gastón Nicolás Figueroa, ambos a bordo de una motocicleta el 31 de julio del año pasado, arribaron al comercio en Líbano y Patricios propiedad de Ariel Claudio Barragán. Portando un arma de fuego sustrajo dinero en efectivo de la recaudación, salió del comercio para emprender su fuga, momento en el que, se encontró con Ramiro Barragán -hermano del dueño del negocio-, quien, al advertir el robo en curso trató de impedirlo tomando por detrás al delincuente, logrando este último zafarse previo forcejeo, tras lo cual el imputado, le disparó con el arma de fuego, impactado el proyectil en la zona del límite superior del glúteo derecho, provocándole lesiones de tal magnitud que determinaron la muerte de Ramiro
Gastó Figueroa permaneció afuera del almacén esperando a pocos metros de distancia
durante todo el tiempo que demandó el robo.
