Aunque todavía no se considera un delito, es un moda peligrosa. La “pornovenganza” consiste en utilizar fotografías y videos tomados en la intimidad para publicarlas o viralizarlas a través de redes sociales o páginas de Internet a modo de venganza. Ligado a esto está el “sexting”. Se trata del envío de cualquier tipo de contenido erótico o pornográfico a través de smartphones.
No sólo constituye un hecho desagradable, sino que la víctima de estas situaciones puede buscar amparo en la justicia.
