El policía que fue murió en un choque y fue abandonado por el conductor que huyó y que tras estar detenido recuperó la libertad
Fabricio Guzmán, tenía 27 años. Era policía hace 3 años y medio y estaba trabajando en Mayor Buratovich, en el partido de Villarino, a 94 kms de Bahía Blanca. Todos los días se tomaba a las 5 am, dos colectivos, desde su casa en el barrio Noroeste y luego hacía “dedo” casi 80 kilómetros para llegar a trabajar, aunque había pedido el traslado hace un tiempo para trabajar en Bahía Blanca, pero nunca se lo concedieron.
Se había casado hace 2 años y tuvieron junto a Antonela (su mujer), a Sara, su hija, que el martes 10 de abril festejó sus 2 años.
Pero algo inesperado le pasó, él salió de su casa a trabajar y en el km 718 de la Ruta 3, Enrique Rodriguez, que se había ofrecido a llevarlo, chocó.
Fabricio murió en el acto. Mientras que el conductor salió ileso y huyó. Algunas horas después, se entregó y quedó detenido.
Pero la jueza Susana Calcinelli, lo liberó por falta de elementos y pruebas suficientes.
La causa está caratulada como homicidio culposo y abandono de persona. A Rodriguez también se lo investiga por otro homicidio culposo en 2002 contra un ciclista.
Y como si fuera poco el dolor, el día que lo velaban, le ingresaron a robar a su casa que alquilaban en Juan Molina al 1900, pero ya poco importa, porque el mayor valor sentimental para Antonela, Sara y su flia, que era Fabricio Guzmán, no volverá. Una historia de un laburante que murió injustamente y que por ahora no descansa en paz ni tampoco tiene justicia.
Esta entrada ha sido publicada el 19 de abril, 2018 15:34
Deja un Comentario