El monóxido es el asesino silencioso, para ello y ante los últimos casos que sucedieron en la ciudad, mucha gente comenzó a consultar sobre los detectores de gas, que a través de una alarma nos pueden avisar el grado de complicación que hay en determinados lugares cerrados.
En algunos locales de Bahía Blanca, se venden a $1.100 pesos y son frecuentes las consultas en esta época del año, por el mayor uso de calefactores y otros artefactos para pasar el frío.