River se quedó con el Superclásico que se jugó este domingo el Monumental. El equipo de Marcelo Gallardo derrotó sin problemas a Boca 2 a 1 y se subió a lo más alto de la tabla de posiciones. Julián Álvarez marcó los dos goles del local y Carlos Zambrano, en la última jugada del partido, logró descontar para el Xeneize.

River ganó y mereció haberlo hecho con una diferencia incluso mayor. Desde que Boca se quedó con uno menos por la expulsión de Marcos Rojo, cuando apenas iban 15 minutos del primer tiempo, el Millonario se adueñó del juego. Nunca más hubo paridad desde ese momento, sobre todo cuando Álvarez logró marcar un doblete antes del entretiempo.

Fue un triunfo que llenó de alegría al Millonario, que desde ahora se ubica en la cima de la Liga Profesional, a la espera del duelo de este lunes de Talleres (visita a Defensa y Justicia). Marcelo Gallardo se vistió para la ocasión para el Superclásico con una corbata que recordó a Ángel Labruna, prócer del club. El Muñeco fue el más ovacionado por los hinchas en la vuelta del público a los estadios.

“¡Gallardo es de River y de River no se va!”, entonaron los hinchas para que el Monumental fuera una fiesta. Los rumores sobre una posible salida en diciembre activó la alarma. El clásico “¡Muñeco! ¡Muñeco!” se escuchó en reiteradas ocasiones.

Tras el partido hubo, como de costumbre, una enorme cantidad de memes en las redes sociales. Uno justamente tenía que ver con la corbata de Gallardo. “Esa corbata sí se deja ver”, se puede leer, junto con una foto del Muñeco y una imagen del Abuelo de Los Simpsons.

Más memes del triunfo de River en el Superclásico

La eufórica reacción de Gallardo ante un gol que lo tomó por sorpresa y que pocos vieron venir

River abrió el partido ante Boca a los 24 minutos del primer tiempo con un remate de Julián Álvarez que venció la débil resistencia de Agustín Rossi. Se trató de un momento clave del Superclásico, ya que el Millonario, en ese momento, lograba dar el primer paso hacia el triunfo. Para el Xeneize, el escenario se complicaba mucho más: con uno menos por la expulsión de Marcos Rojo, empezaba a ver cómo quedaba abajo en el marcador.

Álvarez condujo, enganchó y conectó un remate de derecha que fue al medio del arco. Rossi, a pesar de que no fue un disparo demasiado violento, reaccionó tarde -y mal-, por lo que no pudo detenerlo. Marcelo Gallardo, mientras tanto, hablaba con Matías Suárez en el banco de suplentes, ya que el delantero era uno de los candidatos para reemplazar a Braian Romero, con molestias (finalmente entró Jorge Carrascal).

Cuando Gallardo vio que Álvarez se perfilaba para rematar, dejó de darle indicaciones a Suárez y siguió con atención la jugada. Sabía que algo podía pasar. Cuando la pelota ingresó, el entrenador de River estalló de alegría y se abrazó con el delantero, que lo tenía a su derecha. Luego se dio vuelta y lo celebró con sus colaboradores, con los brazos en alto. Sabía que el primer gol había llegado en un momento determinante.

Fuente: TN