La compañía también confirmó acciones judiciales contra una firma de desarrollo que recopiló datos de los usuarios de la red social en forma ilegal.
Ya lo sabíamos y ahora lo confirmamos: no todo lo que reluce es oro en las redes sociales; ni siquiera algunas cuentas que ostentan gran popularidad, ya que en ocasiones los movimientos no son auténticos. Esta semana Facebook nuevamente echó luz sobre esa realidad: la compañía que dirige Mark Zuckerberg demandó a un hombre que vendía likes, comentarios, seguidores y visitas falsas en Instagram, plataforma de su propiedad.
La empresa con sede central en Palo Alto, California, publicó un comunicado divulgando la demanda presentada contra Nikolay Holper, responsable del servicio Nakrutka, una red de bots y programas automatizados que se usaron para dar popularidad a perfiles de Instagram en forma fraudulenta.
Facebook dijo que antes de confirmar su demanda intentó otros métodos para disuadir a Holper.
Más acciones contra el uso indebido
“Como parte de nuestros esfuerzos continuos para hacer cumplir los términos de servicio y protegernos contra el abuso, presentamos demandas por separado en el Reino Unido y los EE.UU. Esta es la primera vez que Facebook entabla una demanda contra un desarrollador de aplicaciones en el Reino Unido, busca una auditoría y una orden judicial para reforzar nuestra prohibición contra el uso de nuestra plataforma por parte del desarrollador”, señalaron desde la compañía estadounidense.
“Las acciones de hoy son parte de nuestros esfuerzos para proteger a las personas que usan nuestros servicios, y responsabilizar a quienes abusan de nuestra plataforma”, añadieron
En ese marco, conjuntamente con la demanda a Nakrutka la firma estadounidense inició acciones legales contra una compañía de desarrollo británica, MobiBurn, que empleó un software malicioso para recopilar datos de usuarios de Facebook. Autoridades habían reportado que a través del malware se accedió a información como nombres, direcciones de email, género y zona horaria de los usuarios.
En concreto, esa empresa proporcionó un kit de software publicitario (SDK) que permitió a los creadores de aplicaciones insertar anuncios dentro de sus herramientas y monetizar el comportamiento del usuario. Sin embargo, Facebook señaló que ese sistema contenía un código malicioso que recopiló datos ilegalmente.
El dueño de la mayor red social de Internet indicó que en el proceso de auditoría, el acusado no cooperó en forma cabal. En el caso de MobiBurn, la demanda fue presentada en Estados Unidos y en el Reino Unido.
“Los investigadores de seguridad nos señalaron por primera vez el comportamiento de MobiBurn como parte de nuestro programa de recompensas por abuso de datos”, comentó Jessica Romero, directora de cumplimiento y litigio de plataformas en Facebook.
Luego de informes que expusieron esa actividad, el desarrollador dijo que sólo ofreció las herramientas pero que no estaban involucrados en la recopilación ilegal de datos, culpando de eso modo a los creadores de las apps que, según señalaron, abusaron de sus SDK.
Siguiendo al sitio ZDNet, en el pasado la compañía estadounidense presentó demandas similares contra desarrolladores que, con actividades de esa especie, violan los términos y condiciones del servicio. Por caso, a comienzos de 2020 acusaron a la compañía de origen español MGP25 Cyberint Services por vender “me gusta” falsos. En 2019 habían hecho lo propio con una firma radicada en Nueva Zelanda, además de una demanda contra ILikeAd, que fue gestionado por dos ciudadanos chinos para engañar a usuarios y conducirlos a la descarga de malware en la red social.