Se llevará a cabo el viernes 28 de agosto, a las 20.20, desde las instalaciones de SpaceX, en Cabo Cañaveral, en Estados Unidos.
El satélite argentino de observación de la Tierra Saocom 1B, de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE), ya pasó con éxito todos los ensayos para comprobar su correcto funcionamiento y las comunicaciones con los centros de control y soporte en la Argentina. Ya está listo para su lanzamiento el viernes 27 de agosto a las 20:20 hs (hora argentina), sujeto a que se concrete con éxito un lanzamiento anterior, que también se realizará desde Cabo Cañaveral, EE.UU., el miércoles 26 a la madrugada.
“El viernes 21 de agosto realizamos una simulación completa, tal como será el día del lanzamiento, con los equipos de CONAE e INVAP y los ingenieros de SpaceX”, dijo Raúl Kulichevsky, Director Ejecutivo y Técnico de la CONAE, y agregó: “Probamos todos los sistemas de comunicaciones con el Centro de Control de Misión, en el Centro Espacial Teófilo Tabanera de la CONAE, en la provincia de Córdoba, y con las otras sedes que brindan soporte al lanzamiento desde la Argentina”. También participó de esta prueba la estación terrena de Lima, Perú, que recibirá la primera señal del satélite desde el espacio.
Las operaciones simuladas empezaron oficialmente 10 horas antes del horario previsto para el lanzamiento y se extendieron hasta las primeras órbitas del satélite. En total este ensayo demando unas 11 horas de trabajo, con 70 profesionales. “Simulamos exactamente todo lo que va a suceder el día del lanzamiento. Cada profesional estuvo ubicado en el lugar que ocupará en ese momento. Encendimos el satélite, revisamos la telemetría y tomamos todas las decisiones que implica avanzar en las distintas etapas que vamos a realizar para el lanzamiento, tal cual como si fuera ese día”, dijo Kulichevsky.
El viernes pasado el equipo responsable del lanzamiento, en todas sus sedes y bases de comunicaciones y seguimiento, realizó un “ensayo full”, según lo definió la ingeniera Josefina Péres, subgerenta de la jefatura de proyectos de la Gerencia de Proyectos Satelitales de la Conae.
“Es el último ensayo que se hace”, explicó Péres, quien agregó que “el día del lanzamiento arranca 10 horas antes con un procedimiento conjunto entre la empresa del lanzador SpaceX, el equipo de Conae/Invap de Cabo Cañaveral, el de Córdoba, Buenos Aires y Bariloche, así como la empresa VENG y el Grupo de Ensayos Mecánicos Aplicados (GEMA) de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP)”.
La ingeniera agregó que “se simuló todo como si fuéramos a lanzar el satélite, pero sin el lanzamiento”. “Es un procedimiento en el que las últimas ocho horas fueron las más importantes, en las que se probó el lanzador. El equipo Saocom de Cabo Cañaveral probó el satélite, lo encendió, lo configuró y verificó la telemetría”, agregó.
Una vez concretado el último lanzamiento y puesta en órbita del 1B, este y el Saocom 1A, lanzado en 2018, actuarán “en tándem” en el relevamiento de información, orbitando a 620 kilómetros de altura.
Juntos constituirán un sistema de dos satélites de observación terrestre equipados con un radar de apertura sintética SAR polarimétrico en banda L y una antena desplegada de 35 metros cuadrados.
Los satélites obtendrán y emitirán imágenes de muy buena calidad e información sobre los niveles de agua del suelo, fundamental para el agro, y además, permitirán obtener información sobre la presencia de buques en zonas de jurisdicción argentina.