Puntos a favor y en contra de estas herramientas, protagonistas en tiempos de cuarentena.
Las videollamadas se convirtieron en un salvavidas en medio de la cuarentena. Al tiempo que millones de personas en el mundo están en sus casas para frenar el avance del coronavirus, se multiplicaron los videochats con seres queridos, las reuniones de trabajo a distancia y las clases virtuales. En este contexto, las herramientas en la categoría consiguieron un gran protagonismo. Ahora bien, ¿cuál conviene usar?, ¿cuál es más estable?, ¿la más segura?, ¿qué beneficios ofrecen las aplicaciones gratuitas?
Una de las alternativas a la que haremos referencia es Zoom, que consiguió gran visibilidad durante la pandemia: en diciembre del 2019 tenía 10 millones de participantes en reuniones al día, y en marzo superó los 300 millones. A todas luces un crecimiento exponencial. En la otra esquina del cuadrilátero aparece Messenger Rooms, una app para videollamadas que Facebook anunció hace algunas semanas y que ya está disponible para dispositivos móviles y equipos de escritorio.
Las características de Rooms
La herramienta es una extensión del ya conocido FB Messenger, en este caso enfocada en las videollamadas. Una buena noticia: es 100% gratuito. También se aprecia el hecho de que cualquier usuario puede sumarse, incluso sin tener una cuenta en Facebook. Para hacerlo hay que seguir una URL que se crea para la conversación. Una vez dentro de una videollamada, es posible jugar con algunos efectos de realidad aumentada.
Un detalle importante: permite hasta 50 participantes en las llamadas con video. Esta cifra puede ser suficiente para muchos, especialmente para los que conversan con amigos y familiares, aunque puede resultar escasa especialmente para los que dictan seminarios o para reuniones laborales multitudinarias. Otro aspecto a tener en cuenta: las llamadas no tienen límite de tiempo.
La seguridad es una variable fundamental. La compañía de Mark Zuckerberg la promociona como una app confiable, aunque Facebook no tiene el historial más limpio cuando hablamos de la privacidad. Por otra parte, el servicio no ha tenido problemas en su primer despliegue aunque hay algunos ítem en contra, como la imposibilidad de proteger las salas con una contraseña.
Las características de Zoom
Comencemos en el terreno de la seguridad. Tal como contamos arriba, Zoom creció muy fuerte en los últimos meses. Pero su protagonismo también trajo tropiezos: la herramienta tuvo importantes fallas de seguridad, falencias que la propia compañía reconoció. Algunas brechas fueron resueltas y otras están en vías de solucionarse. Como fuere, esto generó que muchos usuarios piensen en alternativas para las videoconferencias, y también fue una oportunidad para que otras compañías lancen o realcen sus propias apps en el rubro.
En cuanto a sus características, Zoom ofrece planes pagos y una variante gratuita. Esta última tiene limitaciones, especialmente en cuanto al tiempo: las llamadas se cortan a los 40 minutos. Es cierto que cuando se alcanza el límite es posible crear un nuevo enlace, enviarlo y seguir conversando, pero eso puede resultar algo molesto. Un punto a favor, también en la versión sin pago es que permite hasta 100 participantes. Los que quieran saltear el límite de tiempo deberán pasarse a una suscripción.
Igual que otras apps del rubro, Zoom permite cambiar el fondo por algunas pantallas más divertidas que la pared blanca de tu living. Pero más allá de esto, la app se destaca por tener una interfaz intuitiva y porque suele tener un funcionamiento estable.
Eso sí, habrá que considerar las falencias de seguridad que ha sufrido este tiempo, y entonces tomar la decisión en un terreno en el que también aparecen otras opciones como Google Meet, Skype de Microsoft, y WhatsApp con sus nuevas funciones pensadas para las videollamadas.
Fuente: TN
