El Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) informó que el próximo 7 de noviembre comenzará el plan piloto de visitas de familiares de internos en todas las cárceles y alcaldías de la provincia.
El anuncio llegó luego de un fin de semana caliente. Lo que el sábado 31 de octubre había comenzado como una protesta por la suspensión de las visitas de familiares desde el 12 de marzo por la pandemia por coronavirus, derivó en toma de rehenes y revueltas con tomas de al menos siete penales bonaerenses.
Como consecuencia de las negociaciones, el SPB había comunicado que las visitas se “habilitarán el 14 de noviembre, dando estricto cumplimiento a los protocolos de seguridad sanitaria para la preservación de la salud pública”.
Pero antes de eso, decidieron lanzar esta prueba piloto, que según estiman en el SPB, “permitirá ajustar detalles para el reinicio de las visitas”, que se implementarán a partir del 14.
Dijeron que la prueba piloto se acordó de forma articulada con los 20 municipios donde están los 63 penales que hay en territorio bonaerense.
Y que la decisión se tomó tras un acuerdo con el Ministerio de Salud bonaerense, que “convalidó el protocolo de salud penitenciaria para dar estricto cumplimiento a las normas de bioseguridad para contexto de encierro en el marco de la pandemia COVID 19”, explicaron desde el SPB.
El protocolo contempla la frecuencia de las visitas, los cupos, las medidas sanitarias y demás precauciones necesarias. “Los municipios colaboraran con el monitoreo y la fiscalización de la aplicación de los protocolos”, detallaron.
En este tiempo, se les había autorizado el uso de celulares para comunicarse y mantener video llamadas con sus familiares.
Con esos mismos teléfonos difundieron durante el fin de semana lo que pasaba en las cárceles y también ampliaron sus pedidos.
Fuente: Clarín
Esta entrada ha sido publicada el 3 de noviembre, 2020 08:00
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