Una de las grandes complicaciones que padecen los celíacos hoy en día es la disponibilidad de productos y los lugares donde los venden.
Muchos, deben alejarse demasiado de sus hogares para conseguirlos y eso conlleva que los efectivos policiales los frenen y quizás multen, porque están rompiendo la cuarentena.
No hay manera que un celíaco pueda probar que lo es y cual es el motivo que lo lleva a trasladarse más allá de las distancias que se consideran aceptables. ACELA, la Asociación de asistencia al celiaco en Argentina, tiene sede en nuestra ciudad y han recibido varias consultas al respecto.